lunes, 4 de abril de 2011

Donde


Mientras la ciudad dormía
no sabia si te encontrabas bien o sufrías.

Mi corazón latía de dolor buscándote
sin saber donde encontrarte.

Mi niño se ha perdido
en la inmensidad de la noche.

Las horas son eternas y
el reloj camina lento
mi niño no aparece.

Te busco en cada rinconcito
de esta inmensa ciudad.

En la claridad del amanecer
te sigo buscando y mis
ojos cansados de llorar no te ven.

Tanta gente y yo buscándote
con la solitaria luna.

Nadie me busca, Nadie me espera
me perdí en la inmensidad de
la noche.

Mi teléfono dejo de timbrar
y yo ansiando tu llamada.

Nadie me ayuda a encontrarte
solo yo y la luna te buscamos.

Miro al cielo y al horizonte esperando
ver tu delgada figura.

Nadie me entiende, Nadie me llama,
el tic tac del reloj, es melodía que
hace que mi alma se angustie.

Mis ojos se cierran
Mis pasos son lentos
Mi mente no piensa.

Solo quiero encontrarte mi niño.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola princesita, me ha cautivado tu poema con sabor a nostalgia por el niño que ya no esta a tu lado.
He visitado tb tus blogs ecológicos.
Mi saludo cordial y admiración.
bss