Siempre pido mal

Yo le pedí a Dios salud para mi familia
y me dio una hija, delicada en su salud
para que en mi debilidad, fuera fuerte y
pudiera consolar y obedecer.

Pedí abundante riqueza y éxitos para ser
feliz y me los dio por un tiempo, después
me dio pobreza y humildad para poder
adquirir sabiduría.

Pedí un esposo para nunca estar sola y me
lo quito y tuve mucha soledad, para que en
mi dolor me acercara a Dios y aprendiera
a depender de El.

Pedí unos hijos exitosos e inteligentes
y me dio unos hijos que aman a Dios por
sobre todas las cosas. Le pedía llorando
irme de aquí y me mantuvo siempre en este
lugar, para que yo encontrara el camino a
casa.

Pedí que mi papá y mi hermano, estuvieran
siempre conmigo y me los quito, a mi papá
le dio alzheimer, a mi hermano el olvido lo
alejo de mi, esto paso para que yo pudiera
conocer a mi padre que es Dios
y a mi hermano Jesucristo.

Pedí todo esto para ser feliz y nada de lo
que pedí recibí, Dios no se equivoca, nos da
lo que es mejor para nosotros. Quizás si el
me hubiera dado cualquiera de esto que yo
pedí, las puertas del cielo no se hubieran
abierto para mi.